Entradas

Toda empresa que se haga preguntas sobre el futuro necesita información para responder esas preguntas, información que es generada en las diferentes áreas de la organización y que implica la reunión, depuración y transformación de los datos en función de la generación del conocimiento que guiará las próximas estrategias de la compañía y fundamentará su planificación en los diversos plazos. 

En el afán por lograr una mayor iluminación en la toma de decisiones, es común que los directivos de una organización recurran a las soluciones que la informática tiene actualmente a disposición; no obstante, muchos aún se cuestionan sobre los beneficios y ventajas que pueden alcanzar con la implementación de sistemas que no fueron creados para ningún otro fin que el de ayudar a las empresas a obtener el crecimiento exponencial. 

La inteligencia de negocios o Business Intelligence (BI) es un sistema destinado a examinar cada elemento y proceso de la organización con la finalidad de lograr una ventaja competitiva frente a las demás empresas de su sector. Al tener la habilidad de transformar los datos en información y la información en conocimiento, BI se constituye como el componente tecnológico de oro de las compañía que desean posicionarse y dominar el mercado. Contar con una plataforma de inteligencia de negocios puede proveer a la empresa de las siguientes ventajas y beneficios: 

  • Ahorro de tiempo y dinero: al integrar diferentes fuentes de información de forma automática para la preparación de análisis. 
  • Aumento de aciertos y disminución de riesgos: al disponer en poco tiempo de información segura y confiable para el proceso de toma de decisiones. 
  • Visibilidad 360: al poder acceder en cualquier momento y lugar a información de todas los sectores funcionales de la organización. 
  • Formación de directivos más capacitados: al poner en sus manos más y mejor información, de manera más accesible, rápida y visual. 
  • Independencia departamental: la flexibilidad y facilidad de uso sólo hacen necesarias pocas consultorías o apoyo del área de sistemas. 

Estacualidades, al ser ejercidaa cabalidad se convierten en la vía que podría llevar a la cima a una compañía de forma más rápida que otra que sigue los métodos de gestión tradicionales o se apoya únicamente en viejas hojas de cálculo. Visto así, Business Intelligence se hace imprescindible para una empresa que busca crecer sostenidamente y destacarse por su competitividad, ¿acaso no queremos todos formar parte de una organización inteligente y de alta rentabilidad?

Business Intelligence (BI) es mucho más que una simple herramienta de visualización con acceso a información estructurada. Su implementación y cabal aprovechamiento pueden llegar, inclusive, a transformar el modelo de negocio de la compañía. 

Eproyecto para implantar una solución de inteligencia de negocios preferiblemente debe contemplarse y desarrollarse de acuerdo con el modelo de gestión empresarial adoptado. De esta forma, la tecnología podrá ser integrada como un complemento funcional de la organización y su contribución para el mejoramiento de ésta será sustancial. No obstante, independientemente de las características y funcionamiento de la empresa, sea que trabaje bajo un modelo de calidad total o uno tradicional, existe una serie de puntos que deben ser atendidopara implementar célebremente un sistema de este tipo.

¿Qué se debe tener en cuenta para la implantación exitosa de BI? 

  1. Se debe establecer por qué y para qué se quiere la solución. No se trata sólo de ser innovador porque es uno de los términos que actualmente más suena en el plano empresarial; se trata de comprender y ejercer la transformación digital de manera superior, al punto de lograr realmente una evolución en el negocio. 
  2. Es preciso planificar. Para ello se debe conocer el estado de situación de la empresasaber con qué sistemas transaccionales u operacionales se cuenta, definir objetivos, metas, determinar qué elementos deben ser controlados, las áreas de la compañía a integrar, acciones a desarrollarcronogramas, etc. 
  3. Se debe asignar responsabilidades tomando en cuenta cuáles son las herramientas más adecuadas para el usuario: visualización, análisis, planificación. Para esto se debe comunicar a la organización sobre latransformaciones y objetivos propuestoscanalizando con mesura la resistencia que comúnmente brota en los períodos de cambio. 
  4. Es indispensable capacitar a los usuarios sobre las herramientas y soluciones escogidas bajo una filosofía de supervisión y acción permanente, lo cual permitirá verificar el cumplimiento de los objetivos o aplicar los paliativos necesarios para llevar el nuevo sistema a puerto seguro. 
  5. Para escoger al aliado de negocio, por criterios referentes a seguridad y escalabilidad, se sugiere ubicar un proveedor de soluciones de clase mundial, que cuente en su haber con un número significativo de implantaciones realizadas, referencias de clientes y ofrezca un soporte eficiente. 
  6. Entre los conceptos a considerar en el presupuesto de implantación se debe tener claro el costo total de licencias, los costos del personal asignado al proyecto, los costos por infraestructura técnica y otros costos relacionados con entrenamientos, soporte o actualizaciones. 

La tecnología bien gestionada puede y debe ser una ventaja competitiva. Abordar con orden y claridad los puntos anteriores ayudará a la empresa a contar efectivamente con Business Intelligence como un recurso capaz de descubrir oportunidades con base en información sólida y confiable, fortalecer la inversión y despertar la sagacidad en quienes ejercen la toma de decisiones. 

Con seguridad, al encender una lámpara muy pocos se deben preguntar cómo es posible que la luz llegue hasta ese objeto. Lo mismo ocurre cuando se emplean tecnologías de la información, es frecuente encontrar usuarios que simplemente dan por sentado que “el sistema” tiene las respuestas, pero muy pocos se preguntan cómo es el proceso informático para lograr que la información se halle disponible justo cuando es requerida. En el caso de las soluciones Business Intelligence (BI), lo que hace posible la obtención de información de las operaciones de la empresa son las fuentes de datos, que pueden definirse como los puntos de abastecimiento de datos con información potencialmente útil para el análisis de un proceso de negocio de la compañía. Los sistemas BI se alimentan de fuentes de donde extraen, transforman y cargan datos en repositorios dimensionales. Estas características, propias de los paquetes de integración de BIparten de los datamart (base de datos centrada en un tema o un área de negocio específica), cuyos datos son explotados por medio de herramientas para la visualización (informes tabulares, gráficas, dashboards, etc.) y de manera que los usuarios no expertos en tecnología puedan comprender para construir por sí mismos los informes. 

Los paquetes de extracción, transformación y carga (ETL por sus siglas en inglés) permiten nutrirse de una diversidad de fuentes de las cuales se extraen y analizan los datos según las reglas de negocio prescritas en la misma lógica del paquete. Lo usual es abastecerse de la información generada en los sistemas CRM (Customer Relationship Management) y ERP (Enterprise Resource Planning). Sin embargo, en ocasiones también se precisa emplear orígenes de herramientas como Excel, sobre todo cuando un usuario requiere acceder a información que no ha sido almacenada en las bases transaccionales u operacionales; sino en la tradicional hoja de cálculo de Microsoft. Por otro lado, en los últimos tiempos se ha visto cómo las empresas han ido aumentando su consideración por las fuentes disponibles a través de internet (open data, Internet de las Cosas, redes sociales), las cuales, al lograr ser integradas con la solución BI implantada en la compañía, pueden complementar significativamente el trabajo de CRM.  

Una plataforma BI bien diseñada aumenta la capacidad de la organización para tomar mejores decisionesUna solución de este tipo puede incluir bases de datos de clientes, información de la cadena de suministro, manufactura, datos de producto, actividades de ventas, marketing y cualquier otra fuente que se considere crítica para las operaciones. Comprender de dónde los sistemas de análisis se sirven las respuestas ayudará a que los usuarios den mayor valor a la inversión y cuiden mejor el tratamiento de uno de los principales activos de la compañía: la información.  

Por lo general, en una organización se opta por implantar Business Intelligence (BI) para apoyar a los sectores de marketing y finanzas; no obstante, en los últimos tiempos el alcance de esta solución ha desplegado para el área de los recursos humanos todo un abanico de posibilidades para optimizar la administración de personal y hacer de la empresa un modelo de gestión en este aspecto. 

 

Los desafíos que el sector de los RRHH debe afrontar se han ido transformando conforme avanzan los mercados y los colaboradores denotan cambios generacionales. Frente al dinamismo del entorno, la retención del talento es una regla de oro para alcanzar el éxito empresarial. Para adecuarse a la realidad con mayor agilidad y atractivo para los profesionales y diversos públicos, la gestión de capital humano debe abordar cuestiones como el reconocimiento a las diversidades y la inclusión; nuevos modelos retributivos; cambios en las formas de trabajo; seguridad de la información, y la globalidad del talento. 

 

Comúnmente, los departamentos de recursos humanos acumulan una cantidad extensa de datos sobre las personas, información que cubre todo el ciclo de vida de éstas en la organización. Este cúmulo de datos puede contener desde la dirección hasta el uso del tiempo y los recursos que cada miembro de la compañía emplea durante su desempeño, por lo que saber analizar y explotar el conocimiento generado a partir de la solución BI en beneficio del negocio significa una revolución corporativa. 

 

 

Business Intelligence facilita enormemente la recopilación y análisis de datos sobre los empleados. Ofrece un conocimiento profundo sobre la empresa y sus colaboradores, y tiene la capacidad de predecir resultados. Entre la multiplicidad de datos que se admiten manejar con BI resaltan, por ejemplo, el rendimiento de un trabajador; promociones o ascensos; tendencias salariales; competencias individuales; formación realizada; uso de recursos; tiempo y costo de reclutamiento, etc. Puede predecir resultados sobre productividad o el tiempo que permanecerá alguien en la compañía. Trascender de la llana emisión de hojas de cálculo a un análisis adecuado ayudará a alinear estratégicamente a los trabajadores con los objetivos corporativos. 

 

De hecho, las posibilidades que para el departamento de RRHH supone BI y la conjunción con otros conceptos analíticos relacionados entre sí (big data, KPI, cuadros de mando) han dado paso al término talent analytics, tendencia emergente cuya inversión ya es priorizada por algunas grandes empresas para retener a los mejores trabajadores, aquellos que toman mejores decisiones y generan valor. 

 

Superar los retos de la analítica enfocada en el talento e integrada al resto del negocio es, sin duda, una de las mayores misiones del área de recursos humanos para elevar su protagonismo en la organización y participar activamente en su mejora 

Cuando hablamos de Recursos Humanos y Business Intelligence (BI) todavía muchas empresas no entienden la relación. Y es que hay industrias en que resulta familiar hablar de procesos automatizados y análisis predictivo, sobre todo en manufactureras o firmas financieras. Sin embargo, en general, el sector de RR. HH. registra un rezago en materia tecnológica que lo mantiene aún alejado de las bondades de BI.

 

El concepto de Business Intelligence se refiere al uso de tecnologías para la recopilación, integración, análisis y presentación de datos e información para orientar la toma de decisiones. BI ofrece la información para que el usuario, basándose en estadísticas guardadas, lleve a cabo una acción determinada.

 

Cuando una nueva nave industrial debe ser ocupada o, quizás, una petrolera debe echar a andar una refinería, con seguridad los responsables de RR. HH. sentirán una enorme presión. No es para menos. Cientos de candidatos deberán responder a una serie de requerimientos que, si no son bien manejados, pueden afectar la productividad y el éxito empresarial. De allí que los esfuerzos por disponer de la tecnología para encontrar a las personas correctas apunten a la vanguardia y a la innovación. Más aun, considerando lo cambiante del mercado laboral.

 

Recursos Humanos y Business Intelligence

 

En entornos con plantillas de colaboradores numerosas, tener a mano soluciones basadas en inteligencia de negocios ayuda a optimizar considerablemente las labores de RR. HH. Al punto de posicionar a la empresa como referente en cuanto a la calidad de sus procesos de contratación. Las áreas de aplicación donde los beneficios de BI se pueden materializar son tres. Si se observa bien, cubren todas las funciones del departamento.

 

  1. Planificación y control del talento: sistemas de planificación de turnos de trabajo y monitoreo de tiempo y asistencia.
  2. Administración de personal: implica pagos y manejo de nómina, así como la gestión de compensaciones y beneficios.
  3. Gestión del talento en todo su ciclo: desde la selección e incorporación de la persona hasta el desarrollo y evaluación del rendimiento.

 

Cuadros de mando en RR. HH.

 

Por medio de tableros personalizados se puede ver todo lo concerniente al personal para tomar decisiones informadas y facilitar procesos de negocio en distintos niveles. Por lo general, lo que más buscan visualizar los responsables de RR. HH. en los paneles son:

 

  1. Costos (evolución, perfil, nivel, demografía)
  2. Plantilla (estructura laboral y rotación)
  3. Absentismo (situación e impacto económico, causas, predicción)
  4. Gestión (formación del talento, alineación con objetivos de negocio)

 

Lo que se quiere alcanzar es un control en los procesos de la A a la Z, a la vez que se favorecen los indicadores clave. Dado que es imposible saber cuándo pueda surgir un inconveniente o alguna dirección requiera un dato en particular, es preciso que el sistema empleado integre herramientas analíticas que permitan convertir tareas engorrosas en fáciles y rápidas consultas. Asimismo, que evolucionen hasta incorporar inteligencia artificial. Con el análisis predictivo es posible conocer cuánto tiempo se estima que esté un trabajador en un puesto. También si la tasa de ausencia laboral aumentará en una temporada específica.

 

Encontrar a las personas correctas es la gran labor de RR. HH; mantener un marco de eficiencia que impacte el proyecto empresarial, la de BI.

 

Microsoft Dynamics 365 Human Resources

 

Microsoft Dynamics 365 Human Resources es el módulo en RR. HH. ubicado en la suite empresarial Dynamics 365 creado especialmente para potenciar a los equipos de trabajo y apoyarlos en su crecimiento dentro de la organización. Conozca más y transforme su gestión: si sus empleados triunfan, también triunfa su negocio.

No cabe duda, la digitalización y la transformación digital son dos aspectos que ya son un hecho. Desde que el nacimiento del internet, el desarrollo de poderosas soluciones, como ERPCRM y Business Intelligence, y la implantación de los sistemas de redes en las organizaciones, una nueva forma de operar ha ido ganando terreno, al punto de hoy considerar casi inviable la existencia de una compañía que se apoye básicamente en herramientas basadas en lápiz y papel o en antiguas hojas de cálculo.

La digitalización y la transformación digital son aspectos que han cambiado la forma en que el ser humano se relaciona con su entorno. En diversas naciones han roto paradigmas e influido en la creación de un nuevo modelo de sociedad. Por su parte, las empresas ingresaron en una carrera por aumentar la competitividad y la eficiencia que está muy lejos de cesar. La digitalización y la transformación digital han evolucionado las mentes en función de nuevas estrategias de negocio y han favorecido el desarrollo de la denominada hipercompetencia.

Durante la cuarta revolución industrial que se vive actualmente, difícilmente se pueda ser únicamente espectador; la transformación invade los espacios públicos y privados; asimismo a las personas, quienes en el plano tanto personal como profesional la viven con todas sus letras. Sin embargo, para las empresas la decisión de ser parte activa de esta transformación no ocurre de manera tan automática.

Para ejercer realmente la transformación digital, y no formar parte de las organizaciones que solamente cambian sus herramientas tradicionales por otras digitales manteniendo el mismo objetivo, se debe cumplir con dos aspectos esenciales:

  1. Estrategia

    Como en toda planificación, se debe determinar cuál es la visión con respecto al cambio y, a partir de ahí, establecer los mecanismos que digitalmente modificarán los procesos en la compañía. Los componentes de la estrategia deben abordar fundamentalmente lo relacionado con los objetivos, alcance, gestión de talento, gestión del cambio, esfuerzo tecnológico e infraestructura.

  2. Liderazgo

    La actitud y la voluntad de quienes lideran los procesos de transformación es determinante para afrontar los cambios exitosamente en la organización. La madurez tecnológica de una empresa está ligada a la capacidad que tienen sus miembros de encabezar iniciativas digitales y engranar adecuadamente los procesos inherentes al salto.

La transformación digital es un proceso evolutivo que busca realinear modelos de negocio. No obstante, a pesar de la enorme concepción técnica que implica, las estrategias para su ejecución deben estar concebidas no sólo desde la tecnología, sino desde las personas que, en definitiva, son quienes tienen la capacidad propiciar un cambio profundo y vinculante en la cultura empresarial.

Moverse o morir

Las migraciones animales lo han afirmado: es necesario moverse, de lo contrario, una próxima temporada podría marcar el fin de un ejemplar o hasta de una especie entera, de eso se trata la resistencia.

Según el diccionario de la Real Academia Española, el término resistencia se define como la “oposición a la acción de una fuerza”. Resistir significa plantar dificultades para la comprensión, manejo, conocimiento o realización de algo. En el ámbito organizacional, la resistencia al cambio presenta una enorme desventaja: frena la adaptación y el progreso, de hecho, podría llegar a ser el factor por el que la adopción de una nueva tecnología no logre funcionar. Sin embargo, también puede ser una fuente de conflicto funcional capaz de estimular el debate saludable sobre las formas de hacer de la compañía.

El hombre es un animal de costumbres

La frase, atribuida al escritor Charles Dickens, cobra sentido al reconocer que el ser humano cuando se enfrenta a una actividad nueva, a un panorama diferente, a un desafío inédito, requiere de un esfuerzo extra por parte del cerebro para encontrar las soluciones a las interrogantes que ahora se le presentan. Caso contrario a lo ocurrido cuando la rutina es repetida una y otra vez, en forma automática.

Aún en el ámbito organizacional, las costumbres crean una zona de confort que limita a las personas en su manera de pensar, crear y sentir, pero ¿qué pasa cuándo las circunstancias y demandas del entorno cambian? Se precisa de un proceso evolutivo que permita adaptarse a los cambios y avanzar de forma individual y colectiva.

Lidiar con el engendro: el sistema

La transformación digital es la reinvención de la organización a través del empleo de la tecnología para mejorar la forma en que la empresa se desempeña interna y externamente. El término digital hace referencia al uso de la tecnología que genera, almacena y procesa datos –tecnología de la información-. Llevar adelante esta metamorfosis obliga a las organizaciones a repensar sus procesos y a asumir lo que pudiera ser su mayor reto: cambiar la cultura empresarial.

La implantación de sistemas ERP, CRM o Business Intelligence va más allá de la instalación de un paquete de software; implica un cambio en la filosofía y en las estrategias operativas y comerciales de la empresa. Se trata de un proceso que altera la cadena de valor y busca optimizar lo inherente a la organización.

Cuando a un colaborador se le informa que deberá cambiar la forma en que viene trabajando desde hace varios años, éste podría sentir confusión y manifestar su resistencia al cambio con crítica, negación, hipocresía, sabotaje, fácil acuerdo (sin compromiso), distracción (se evade el cambio) o silencio. Podría no tener en cuenta la forma en que se adaptó al sistema anterior y que sus modos de conducta son el resultado de un aprendizaje y una adaptación cumplida; por tanto, todo aquello que altere lo habitual podría parecerle difícil y peligroso. Este tipo de situaciones es frecuente constatarlas cuando un trabajador debe dejar de lado su libreta o formato Excel para tomar una Tablet en el medio del depósito e ingresar información en una plataforma totalmente extraña. Asimismo, en un departamento de marketing que, antes de contar con una solución CRM, priorizaba las ventas por sobre el deseo y la relación con los clientes.

Ganarle al monstruo: la resistencia

Lo ideal para superar la resistencia al cambio en la transformación digital o en la implantación de sistemas operacionales o transaccionales, sería contar con un equipo de gestión del cambio; no obstante, si no se logra disponer de un equipo de profesionales de este tipo, es preciso tener en cuenta que el proyecto deberá requerir de un responsable capaz de trabajar los siguientes aspectos:

  1. Empatía: es fundamental conocer cómo los colaboradores de la empresa perciben el cambio y comprender posicionamientos, preocupaciones y miedos.
  2. Comunicación: se debe compartir la información relevante, resaltar los beneficios del cambio, apoyar la resolución de miedos, generar confianza y expectativas tan positivas como realistas.
  3. Capacitación: hará valer la inversión y promoverá el aprovechamiento pleno de las tecnologías o soluciones.
  4. Reconocimiento: es clave animar el cambio y valorar el esfuerzo de los usuarios con incentivos que alineen los comportamientos con la adopción de las tecnologías.
  5. Medición: resulta útil y motivador en la medida en que se alcanzan los objetivos.

La transformación digital involucra el empleo de herramientas diseñadas para incrementar la eficiencia y productividad de la empresa, no los problemas. Entender que la resistencia al cambio es una actitud normal y que puede ser gestionada, ayudará a la compañía a superar con más rapidez las fases de la transformación y vivir la innovación por medio de los beneficios y ventajas que las tecnologías de la información tienen para ofrecer.

Business Intelligence (BI) es mucho más que una simple herramienta de visualización con acceso a información estructurada. Su implementación y cabal aprovechamiento pueden llegar, inclusive, a transformar el modelo de negocio de la compañía.

El proyecto para implantar una solución de inteligencia de negocios preferiblemente debe contemplarse y desarrollarse de acuerdo con el modelo de gestión empresarial adoptado. De esta forma, la tecnología podrá ser integrada como un complemento funcional de la organización y su contribución para el mejoramiento de ésta será sustancial. No obstante, independientemente de las características y funcionamiento de la empresa, sea que trabaje bajo un modelo de calidad total o uno tradicional, existe una serie de puntos que deben ser atendidos para implementar célebremente un sistema de este tipo.

¿Qué se debe tener en cuenta para la implantación exitosa de Business Intelligence?

  1. Se debe establecer por qué y para qué se quiere la solución. No se trata sólo de ser innovador porque es uno de los términos que actualmente más suena en el plano empresarial; se trata de comprender y ejercer la transformación digital de manera superior, al punto de lograr realmente una evolución en el negocio.
  1. Es preciso planificar. Para ello se debe conocer el estado de situación de la empresa, saber con qué sistemas transaccionales u operacionales se cuenta, definir objetivos, metas, determinar qué elementos deben ser controlados, las áreas de la compañía a integrar, acciones a desarrollar, cronogramas, etc.
  1. Se debe asignar responsabilidades tomando en cuenta cuáles son las herramientas más adecuadas para el usuario: visualización, análisis, planificación. Para esto se debe comunicar a la organización sobre las transformaciones y objetivos propuestos, canalizando con mesura la resistencia que comúnmente brota en los períodos de cambio.
  1. Es indispensable capacitar a los usuarios sobre las herramientas y soluciones escogidas bajo una filosofía de supervisión y acción permanente, lo cual permitirá verificar el cumplimiento de los objetivos o aplicar los paliativos necesarios para llevar el nuevo sistema a puerto seguro.
  1. Para escoger al aliado de negocio, por criterios referentes a seguridad y escalabilidad, se sugiere ubicar un proveedor de soluciones de clase mundial, que cuente en su haber con un número significativo de implantaciones realizadas, referencias de clientes y ofrezca un soporte eficiente.
  1. Entre los conceptos a considerar en el presupuesto de implantación se debe tener claro el costo total de licencias, los costos del personal asignado al proyecto, los costos por infraestructura técnica y otros costos relacionados con entrenamientos, soporte o actualizaciones.

La tecnología bien gestionada puede y debe ser una ventaja competitiva. Abordar con orden y claridad los puntos anteriores ayudará a la empresa a contar efectivamente con Business Intelligence como un recurso capaz de descubrir oportunidades con base en información sólida y confiable, fortalecer la inversión y despertar la sagacidad en quienes ejercen la toma de decisiones.